Ansiedad y comida

Hay quien no sabe comer y por eso está gordo.
Hay quien disfruta tanto comiendo que se excede y por eso está gordo.
Hay a quien solo le gustan las cosas que engordan y por eso está gordo.
Hay quien tiene un metabolismos caprichoso, le engorda hasta el aire que respira, y por eso está gordo.
Y hay también quien come como el que fuma, para liberar estrés, para rellenar un vacío que no es físico o para encontrar una vía de escape, y por eso está gordo.

Cuando se junta la afición y la devoción por la comida con esa fuerza invisible que lleva a abrir la nevera cuatro veces en un día para ver si alguien ha añadido mágicamente algo delicioso estás perdido. A la cuarta vez que abres la nevera acabas cogiendo algo que descartaste las tres primeras porque no iba a venir a solucionar nada, pero ya da igual, lo intentas.

La vida siempre va acompañada de estrés, hagas lo hagas y te vayan las cosas tan bien como habías deseado. Es algo que la persona no elige pero que la acompaña. Cuando las cosas no van bien, hay estrés por una situación difícil. Cuando las cosas pintan mal, hay estrés porque es muy posible que lo que tienes sea insostenible, y el estrés tira por tierra la capacidad de disfrutar de esa buena situación el tiempo que le quede. Incluso cuando las cosas están bien, es posible estar estresado por saber que todo lo bueno se acaba, por querer mantenerlo a toda costa, o por querer siempre un poco más.

El estrés puedes liberarlo haciendo reiki, meditación, artes marciales, running, fumando, bebiendo o... comiendo. Cuando estás ya gordo como un buey por manejar gastronómicamente la ansiedad y te sobreviene una situación de máxima intensidad las consecuencias pueden ser devastadoras. "Estoy jodido, mi vida se va a la mierda y me dices que me coma una zanahoria en vez de un donut relleno de chocolate?".

Cuando estás a dieta por una larga temporada y se te viene encima una temporada de alto estrés y la ansiedad te penetra por todos los poros es fácil que todo se tambalee. Si consigues encontrar la manera de superarlo o encontrar un sustituto, seguramente salgas reforzado.